Espaniol News Agency

Las fuentes de inteligencia, que hablaron bajo condición de anonimato por razones de seguridad, señalaron que los agentes del Mossad identificaron los principales factores estratégicos y las condiciones políticas que permitieron preparar e iniciar el ataque contra Irán. Entre ellos figuraban la intensificación de la guerra por poderes, la elección de Trump y el impulso de las negociaciones nucleares con las potencias occidentales.

El 13 de junio, Israel llevó a cabo numerosos ataques terrestres y aéreos contra Irán, matando a altos mandos militares, científicos nucleares y políticos, y dañando o destruyendo sistemas de defensa aérea e instalaciones nucleares militares iraníes.

Irán, con la ayuda de sus aliados hutíes en Yemen, respondió con ataques con misiles y drones contra ciudades e instalaciones militares israelíes.

Estados Unidos defendió a Israel de estos ataques y, al noveno día, bombardeó tres instalaciones nucleares iraníes. Irán, posteriormente, atacó una base estadounidense en Catar. El 24 de junio, bajo presión de Estados Unidos, Israel e Irán acordaron un alto el fuego.

Una fuente israelí declaró a Euronews que Israel nunca ha ocultado su intención de destruir el programa nuclear iraní y que sólo aceptaría una solución diplomática si impidiera no sólo el enriquecimiento de uranio, sino también la capacidad de Irán para representar una amenaza existencial para el Estado de Israel.

Las fuentes añadieron que los esfuerzos diplomáticos no habían dado resultados tangibles y que, tras el primer mandato de Trump (2016–2020), aumentaron las tensiones entre Estados Unidos e Irán.