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Durante la conferencia de prensa de ayer en Moscú, en la que Putin respondió a las propuestas de alto el fuego de EE.UU. para la guerra entre Ucrania y Rusia, afirmó que apoyaba un alto el fuego de 30 días pero que aún quedaban importantes cuestiones sin respuesta que debían discutirse con el gobierno de EE.UU. Señaló que podría necesitar hablar sobre el tema con el presidente estadounidense Donald Trump por teléfono.

Más temprano, un portavoz del presidente ruso declaró que la propuesta solo tenía como objetivo dar "un respiro" a los ucranianos. Los funcionarios ucranianos ya anunciaron que aceptan la oferta.

Putin subrayó que el acuerdo de alto el fuego debería conducir a una solución a largo plazo del conflicto entre Rusia y Ucrania y abordar sus causas fundamentales.

Durante la conferencia de prensa, Putin elogió a las tropas rusas. Dijo que los próximos pasos dependerían de la eficacia con la que lograran repeler el avance de Ucrania hacia la región de Kursk. El presidente agregó que sus tropas han logrado avances significativos en la región y en todo el frente en los últimos días.

Los ucranianos lanzaron sus ataques sorpresa en la región de Kursk por primera vez en agosto del año pasado, logrando tomar el control de una parte significativa del área. En los últimos días, las fuerzas rusas han recuperado varias aldeas una tras otra. Ayer por la mañana, el gobierno ruso anunció que había retomado el control de la ciudad de Sudzha.