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El Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania anunció que, tras la reunión del Consejo de Ministros de la OSCE, 42 países emitieron una declaración conjunta condenando los ataques de Rusia contra la infraestructura energética civil en Ucrania.

La declaración señaló que, en el marco de los ataques a gran escala iniciados en 2022, Rusia ha atacado infraestructuras energéticas en toda Ucrania, provocando víctimas civiles, graves daños en viviendas e instalaciones energéticas y cortes eléctricos de emergencia en muchas regiones. También se indicó que las condiciones invernales agravan aún más las consecuencias de estos ataques.

Se destacó que atacar la infraestructura eléctrica, considerada crítica por el Organismo Internacional de Energía Atómica para la conexión externa de instalaciones nucleares, representa un riesgo para la seguridad nuclear.

La declaración recordó que atacar a civiles y a infraestructura civil constituye una violación del derecho internacional humanitario y puede equivaler a un crimen de guerra. Se enfatizó que Rusia debe rendir cuentas y no puede quedar impune.

Asimismo, se instó a Rusia a detener los ataques y participar seriamente en un proceso de negociación. Los países expresaron su apoyo a los esfuerzos de Ucrania por lograr una paz justa y duradera basada en el derecho internacional.

La declaración conjunta fue respaldada por Albania, Andorra, Austria, Bélgica, Bosnia y Herzegovina, Bulgaria, Canadá, Croacia, la Administración Grecochipriota, Chequia, Dinamarca, Estonia, Finlandia, Francia, Georgia, Alemania, Grecia, Islandia, Irlanda, Italia, Letonia, Liechtenstein, Lituania, Luxemburgo, Malta, Moldavia, Mónaco, los Países Bajos, Noruega, Polonia, Portugal, Rumanía, San Marino, Eslovaquia, Eslovenia, España, Suecia, Suiza, Ucrania, el Reino Unido, así como los socios asiáticos de la OSCE: Australia y Japón.