Espaniol News Agency

Las autoridades japonesas han aprobado la decisión de poner nuevamente en funcionamiento la planta nuclear más grande del mundo, que ha estado inactiva durante más de diez años después de la catástrofe nuclear de Fukushima. Esta decisión se tomó en un momento crítico cuando el país intenta reducir su dependencia de los combustibles fósiles.

A pesar de las preocupaciones de muchos residentes locales, la asamblea de la prefectura de Niigata, donde se encuentra la planta de Kashiwazaki-Kariwa, aprobó el lunes un proyecto de ley que permite a la empresa de energía Tokyo Electric Power Company (TEPCO) reiniciar uno de los siete reactores de la planta.

Según el informe de la emisora pública japonesa NHK, la compañía planea reiniciar el reactor número 6 alrededor del 20 de enero.

Japón ha adoptado un enfoque cauteloso respecto a la energía nuclear desde el desastre de Fukushima, que fue causado por un terremoto masivo y un tsunami de magnitud 9.0 en 2011, lo que condujo a la fusión nuclear en la planta Fukushima Daiichi. Esta fue la mayor catástrofe nuclear mundial desde Chernobyl en 1986.

Después de la catástrofe, Japón cerró todas sus 54 plantas nucleares, incluida la planta de Kashiwazaki-Kariwa, que se encuentra en la zona costera y portuaria de Niigata, a unos 320 kilómetros al norte de Tokio.

Según la Asociación Mundial Nuclear, desde entonces Japón ha reiniciado 14 de sus 33 reactores nucleares operativos.